Una Navidad sin música no es Navidad. La Navidad resuena en medio del silencio con cantos de acción de gracias y súplicas.
El pasado martes, en la Parroquia San Cosme y San Damián, tuvo lugar el Oratorio de Navidad siguiendo el relato del Evangelista San Lucas. Villancicos y poesía a partes iguales… «Hemos venido a adorarlo».
El grupo vocal Ulanka, junto a los Pueri Cantores de la catedral y la Coral Joven, pusieron la voz a la Navidad de una manera muy bonita: cantando juntos. Un gran acontecimiento para el recuerdo.
¡Seguimos sumando momentos de encuentro! ¡Juntos no solo somos más, sino que también somos mejores!
